Biometría: El Futuro de la Seguridad en los Pagos

La Biometría Marca el Futuro de la Seguridad en Pagos

Pagar con reconocimiento facial o con la palma de tu mano: ¿es ya una realidad o sigue siendo una posibilidad futura? Jean-Philippe Niedergang, Director Comercial del Grupo y CEO de EMEA en Castles Technology, explica cómo la biometría está revolucionando los pagos y la experiencia del cliente.

El uso de la biometría como herramienta de identificación no es algo nuevo; se remonta a tiempos antiguos cuando las huellas dactilares se utilizaban como firmas y sellos. Lo revolucionario es su aplicación en la tecnología de pagos. Sin embargo, existe una brecha entre las expectativas y la realidad. Desde 2010, ha habido una aceleración en esta tendencia, principalmente en el uso de smartphones, mientras que el sector fintech aún está en fases de prueba hoy en día. Aunque el escepticismo es fuerte en Francia, algunos actores ya han comenzado a innovar en este campo.

La Biometría al Servicio de la Innovación

El uso de huellas dactilares como medio de verificación en smartphones ha fomentado el desarrollo de la biometría en fintech. Según una encuesta realizada por Visa, el 79% de los franceses confían en la biometría como un medio seguro de autenticación, y según el Groupement des Cartes Bancaires (CB), el 52% de los franceses preferiría usar su huella dactilar en lugar de su código PIN.

Con una tarjeta biométrica, es suficiente colocar un dedo sobre ella para validar una transacción sin límite, siempre que esté preautorizada. Porque, hoy en día, los datos biométricos de la tarjeta se almacenan de forma segura en el chip, en lugar de ser enviados a los servidores bancarios o comunicados a los comerciantes.

El Futuro de los Pagos

El reconocimiento facial, las huellas dactilares, los escáneres oculares y las impresiones de mano son algunas de las innovaciones esperadas en el mercado de pagos.

Según un estudio de Dentsu Data Lab, realizado en 14 países en 2021, el 81% de los encuestados estarían dispuestos a usar huellas dactilares en lugar de códigos PIN. Esta innovación podría mejorar la experiencia del cliente, que hoy en día, es un desafío continuo para los comerciantes.

Al utilizar un mecanismo totalmente personal e irremplazable, el pago biométrico reducirá significativamente el fraude en los puntos de venta y permitirá una mayor eficiencia en el proceso de pago automatizado reduciendo los tiempos de espera para los clientes.

Si hoy en día, los monederos móviles en sus diversas formas son una tendencia, la llegada de terminales de pago biométrico constituye una verdadera innovación disruptiva en el mercado. Sin embargo, el desarrollo de este tipo de tecnología no solo concierne a los proveedores de terminales de pago, sino también a los bancos.

Un Futuro Lleno de Desafíos

La biometría enfrenta tres desafíos: costo, seguridad y almacenamiento de datos.

Es claro que la tarjeta biométrica incurre en un costo adicional para el consumidor, en términos de precio, pero también hay un costo para el comerciante debido a la transformación de los terminales de pago.

Desde el punto de vista de la seguridad, esta forma de verificación es mucho más difícil de hackear que un código de cuatro dígitos. Sin embargo, el riesgo de que información biométrica irremplazable pueda ser obtenida por hackers genera dudas entre los consumidores.

El almacenamiento de esta información encriptada plantea preguntas en la evolución de los pagos biométricos. ¿Quién debe ser responsable de asegurar la seguridad de la información biométrica, el banco o el proveedor del terminal de pago? Esta cuestión depende en gran medida de la confianza de los usuarios.

La tarjeta de pago biométrica sin contacto es actualmente el único método de pago biométrico en el mercado, pero su evolución hacia otros formatos como el patrón de venas en una mano o el reconocimiento facial se espera sea el próximo paso. La tecnología biométrica ya utilizada en smartphones y su nivel de aceptación demuestran que el mercado de consumidores está listo para embarcarse en esta nueva era innovadora en el sector financiero. Es innegable que la tecnología biométrica aporta una identificación más segura y una mejora en la experiencia del cliente al sector de pagos.