La Fortuna Acompaña a los Audaces: Adaptación y Crecimiento en la Industria de Pagos
La industria de pagos, antes caracterizada por su rápido crecimiento, está entrando en una fase de madurez. Inversores, reguladores y clientes ya no solo exigen expansión; buscan un crecimiento rentable basado en modelos de negocio sostenibles. Esta transformación refleja tendencias más amplias del mercado, que incluyen expectativas cambiantes de los clientes, avances tecnológicos y un mayor escrutinio regulatorio. Para prosperar, la industria de pagos debe adaptarse de manera rápida y decidida.
El Crecimiento se Está Desacelerando
Las empresas de pagos han demostrado históricamente sólidos rendimientos para los accionistas, comparables a los sectores tecnológicos de alto crecimiento. Sin embargo, en los últimos años, las tasas de crecimiento han disminuido. Actualmente, los retornos totales para los accionistas de las empresas de pagos están alineados con el S&P 500, lo cual indica un mercado más maduro.
Los inversores han cambiado su enfoque hacia la economía unitaria, diferenciando entre empresas con ingresos estables, similares a SaaS, y aquellas con fuentes de ingresos más volátiles, similares a los bancos. Además, se proyecta que el crecimiento de los ingresos globales disminuirá a una tasa compuesta anual del 5%, alcanzando los 2,3 billones de dólares en 2028, frente al 9% experimentado en los últimos cinco años. Algunos factores que contribuyen a esta perspectiva de desaceleración son:
- La transición estructural del efectivo a pagos digitales está alcanzando su punto máximo.
- El impulso macroeconómico de las tasas de interés crecientes y la inflación está retrocediendo.
- Las empresas de pagos enfrentan una presión creciente en costos.
Para seguir creciendo, las empresas deben priorizar estrategias a largo plazo y resistir la tentación de centrarse únicamente en las ganancias a corto plazo.
Principales Disrupciones que Exigen Cambio
Varias fuerzas están impactando en el panorama de los pagos, obligando a las empresas a adaptarse o quedarse atrás:
Presiones Macroeconómicas. La disminución de las tasas de interés y la estabilización de la inflación están erosionando los márgenes de depósito, especialmente en Europa y América del Norte. Además, los consumidores están dejando de depositar en sus cuentas actuales para buscar productos con mayor rendimiento, lo que ejerce presión sobre los modelos de ingresos tradicionales.
Estancamiento de la Conversión a Pagos Digitales. En mercados clave como EE. UU., Reino Unido y Europa, la transición de efectivo a pagos digitales se está estancando, limitando uno de los principales motores de crecimiento de la industria.
Mayor Vigilancia Regulatoria. La supervisión regulatoria más estricta y las sanciones por incumplimiento están poniendo en riesgo el capital de las empresas. Esto obliga a invertir en infraestructura de gestión de riesgos y cumplimiento normativo.
Presiones de Costes y Eficiencias Tecnológicas. Los costos operativos en aumento, junto con sistemas heredados ineficaces, están limitando significativamente a las empresas de pagos. La falta de eficiencia en estos sistemas incrementa los costos de mantenimiento y reduce la agilidad, dificultando la innovación y escalabilidad.
Dejar Atrás Estrategias Viejas para Adoptar Decisiones Audaces
Para adaptarse a un crecimiento más lento, las empresas de pagos deben enfocarse en varias áreas clave para asegurar su éxito a largo plazo:
Modernizar la tecnología. Una arquitectura modular y escalable basada en la nube es esencial para mejorar la economía unitaria, agilizar la innovación de productos y profundizar en el valor para el cliente.
Reinventar los pagos para bancos. Los bancos deben replantear su enfoque en pagos, maximizando su núcleo, expandiéndose hacia negocios adyacentes y experimentando con nuevos modelos de negocio de alto valor.
Comprometerse con infraestructuras emergentes. Las empresas de pagos deben liderar en la creación de nuevas infraestructuras de pago, como pagos instantáneos y monedas digitales, que ofrezcan nuevas maneras de añadir valor y cumplir con las exigencias regulatorias.
Fortalecer las funciones de riesgo y cumplimiento. Con el aumento de las presiones regulatorias, es fundamental reforzar los marcos de riesgo y cumplimiento, no solo para evitar sanciones sino para generar confianza en los inversores y asegurar el crecimiento a largo plazo.
Para satisfacer las demandas cambiantes de inversores, reguladores y clientes, las empresas de pagos deben ir más allá de lo establecido y adoptar decisiones audaces y estratégicas. El éxito a largo plazo depende de la modernización de la infraestructura y la optimización de la asignación de capital. Aquellos que actúen de manera decisiva desbloquearán nuevas oportunidades de crecimiento y construirán negocios resilientes y de alto margen.
Para obtener más información sobre estos temas, consulta las siguientes fuentes:
Autor: Raul Machado